“Muchas veces se dice que Borges hablaba de los mismos temas, pero nunca de la misma forma. Es decir que él se adecuaba al receptor, que es lo mismo que decir que tenía las estrategias de un comunicador. Como ejemplo aparecen sus conferencias, que es lo que estamos estudiando ahora con la gente de la Biblioteca Nacional”, cuenta Blanco. Y agrega, “es un tema que nos interesa porque es una novedad, los textos de las conferencias son objetos nuevos y estos, así como las clases de literatura inglesa, nos están empezando a mostrar un Borges oral que no estaba estudiado”.
"Borges demostró que se podía vivir de la escritura y lo practicó, pero, otro dato más, también demostró que se puede trabajar para consolidar esa figura de escritor. Borges fue genial en eso también. Y ese camino fue importantísimo. Deconstruyamos la imagen del Borges viejo porque eso nos lleva a un montón de equívocos. No es humanizar su figura por humanizarla, nada más. Es decir, en un momento Borges se tuvo que hacer conocido, no nació conocido, entonces todo lo que trabajó para que esa figura, merecidamente ya que escribía muy bien, tuvo sus logros."